Un estudio de Chartered Institute for Personnel and Development (CIPD) en Reino Unido encontró que alrededor del 26 % de grandes empresas del sector privado prevén menores plantillas en los próximos 12 meses atribuibles al impacto de la inteligencia artificial, frente al 9 % en pequeñas y medianas empresas. Financial Times
Este escenario plantea un doble reto para las áreas de Recursos Humanos: por un lado, la necesidad de asumir que la automatización y la IA ya no son tendencias del futuro, sino aceleradores del presente; por otro, la urgencia de replantear cómo se gestiona el talento, la experiencia del empleado y la cultura corporativa en medio de recortes y reapropiación de roles.
Los profesionales de RRHH deben preguntarse:
¿cómo seguir siendo un socio estratégico cuando gran parte del “trabajo repetitivo” está siendo automatizado?
¿Cómo garantizar que los procesos de selección, desarrollo y permanencia integren la tecnología sin sacrificar el factor humano?