Módulo #7- Instrucciones vs. Peticiones


Dar estructura interior por medio de la Instrucción

  1. ¿Cuál es una petición común (que yo hago) que puedo convertir en una instrucción?


La acción dirige - Las palabras siguen

  1. ¿Cuál es una ocasión diaria simple donde puedo practicar el principio de primero actuar y después hablar? 


Instrucciones Dos-por-Dos

  1. ¿Cuáles son las situaciones más comunes en las que tengo que transformar las peticiones que digo "de pasada", en instrucciones Dos-por-Dos? 


Manejo de conflictos

  1. DADD - Desaprueba - Afirma - Descubre - De nuevo hacer




Desaprueba - Afirma - Descubre - De nuevo hacer (DADD)

UNA HERRAMIENTA COTIDIANA PARA TRABAJAR CON LAS PELEAS, COMENTARIOS DESPECTIVOS Y MAL COMPORTAMIENTO DE LOS NIÑOS


Esta herramienta puede ser utilizada para manejar de manera simple y directa un pleito entre niños o bien con un solo niño cuando está en plan desafiante o atorado. Se puede aplicar al calor del momento para enfriar las cosas o bien a lo largo de uno o dos días cuando el asunto sea más complejo. Te permite intervenir con confianza y tranquilidad cuando un niño o niña necesita ayuda, sin quedar atrapado en la pelea o parecer que estás tomando partido.



Primero... DESAPRUEBA

Puedes empezar por describir lo que sucedió muy brevemente "Le acabas de pegar a tu hermana", "Veo que estás muy enojada", "Lo que dijiste no fue nada amable." Expresar clara desaprobación por la acción: "Eso duele cuando lo haces". ?No nos hablamos así en la casa.? Usa lenguaje positivo cuando sea posible. "Todos estamos aprendiendo a ser amables en esta familia." "Se vale enojarse, no se vale pegarle a nadie."... Habla directamente pero con calma. Di lo menos que puedas, pero dilo en serio.


Y... AFIRMA

Sabemos que debemos separar las acciones de un niño de su persona, pero no siempre es fácil. Para lograrlo, la parte Describe/Desaprueba tiene que ser seguida de inmediato por una afirmación... "Tú casi nunca hablas así". "Tú sabes ser amable", "Tú siempre ayudas"



Nota: si tu hija(o) es muy sensible, quizás prefieras invertir el orden, primero afirmarla y luego desaprobar la acción. Lo importante es siempre evitar poner adjetivos a la persona, sólo se juzga la acción. En vez de decir: "No seas grosera!" puedes decir: "eso que hiciste/dijiste no es nada amable, es grosero". Recuerda siempre reconocer qué tipo de temperamento son tus hijos y adaptar cualquier técnica recomendada a cada niño y cada situación particular.



Y ahora, UN MOMENTO DE DECISIÓN

  1. ¿Tengo tiempo de continuar con el proceso de descubrir las causas?
  2. ¿Mi hija(o) parece estar lista para contarme más?
  3. ¿Estamos en un lugar razonablemente adecuado para platicar?


Si la respuesta a estas preguntas es SI, es una buena idea seguir en el flujo de la situación y pasar a la fase de "Descubre" y "Repara". Sin embargo, si la respuesta a cualquiera de estas preguntas es no, es mejor diferir el momento diciendo algo así como: "Parece que tenemos que esperar un poco para hablar, pero quiero oír qué te está molestando, porque seguro que algo pasa. Voy a preguntarte más tarde." Si la situación es entre hermanos, quizás tengas que hacer un simple redireccionamiento hacia una actividad con ambos niños o niñas junto contigo para que la situación no vuelva a dispararse.



Entonces... DESCUBRE

Luego el adulto trata de descubrir cuáles son las razones sutiles detrás del comportamiento; cuando el niño o niña es muy pequeño, el adulto se pregunta: "¿Estará mi hija estresada? ¿Qué es lo que está pidiendo en realidad?" O bien, si se trata de una niña o un niño mayor, se le puede preguntar directamente, con cariño: "Algo te ha de estar molestando" o "¿Qué pasa?" Esta pregunta debe llegar al momento correcto para recibir una respuesta honesta.



Finalmente... DE NUEVO HACER

Cuando se aclara el problema el adulto puede ayudar al niño a repetir o reparar la acción, diciendo de manera amable pero firme: "A ver, vamos a buscar una manera de decir lo que quieres sin pegar" o "Puedes decir lo que no te gusta sin lastimar" o "¿Cómo podemos decir eso mismo que pudiera funcionar mejor?" "¿Cómo sería una forma más amable de pedirlo?" Para mayores: "¿Cómo quisieras que te lo dijera tu hermana a ti?" y para reparar una falta: "Necesitas ahora reparar lo que pasó, si quieres te ayudo con ideas."



Este proceso trae más aprendizaje que una disculpa forzada

Los padres pueden modelar o demostrar ofreciendo una disculpa auténtica y reparando situaciones entre ellos, frente a los niños: "Ay, discúlpame, cariño, eso sonó poco amable... déjame volverlo a decir.... Qué bien que estamos todos aprendiendo a ser más amables". Los padres solo tienen que hacer esto --de manera genuina-- unas cuantas veces para que los niños pequeños empiecen a imitarlos.