La fórmula maestra en procesos de ventas High Ticket - Explicación
Las ventas de alto precio no solo se centran en el costo elevado del producto o servicio, sino en ofrecer un valor excepcional y resultados transformadores.
Los errores comunes incluyen no comprender el verdadero valor de la oferta, enfocarse demasiado en características en lugar de beneficios, y no conectar con las necesidades reales del cliente.
Las tres preguntas que tiene todo cliente son:
1¿Funcionará esto? : Esta pregunta refleja la preocupación del cliente sobre la efectividad del producto o servicio. El cliente quiere asegurarse de que lo que está considerando comprar realmente resolverá su problema o satisfará su necesidad.
2.¿Es esto verdad? : Esta pregunta se centra en la credibilidad y la autenticidad de lo que se ofrece. El cliente busca confirmar que las promesas y afirmaciones sobre el producto o servicio no son exageradas o falsas.
3.¿Podré hacerlo yo? (¿Funcionará para mí?) : Esta pregunta trata sobre la aplicabilidad personal del producto o servicio. El cliente quiere saber si podrá utilizarlo con éxito en su contexto específico y si está equipado para aprovecharlo al máximo.
La propuesta de valor debe ser tan atractiva y convincente que el cliente perciba tu oferta como la mejor solución a sus necesidades o problemas.
Es crucial que los clientes entiendan y aprecien lo que estás ofreciendo. La claridad y la persuasión son fundamentales en tu comunicación.
Los cuatro criterios a tener presentes son que sea: Medible, Declarable, Comprensible y Deseable
1.Que sea medible: La oferta debe tener beneficios que puedan ser cuantificados o medidos de alguna manera. Esto ayuda a los clientes a entender el valor tangible que recibirán.
2.Que sea declarable: La oferta debe poder ser comunicada de manera clara y concisa. Debes poder explicarla en una o dos frases sencillas.
3.Que sea comprensible: La oferta debe ser presentada en un lenguaje y términos que el cliente pueda entender fácilmente, evitando confusiones o malentendidos.
4.Qué sea deseable: La oferta debe ser algo que los clientes deseen activamente, respondiendo a sus necesidades o deseos.