La jurisdicción penal es la función pública ejercida por órganos especializados (jueces y tribunales), mediante la cual se aplican las normas del Derecho Penal para resolver conflictos surgidos por la comisión de delitos. Esta jurisdicción tiene como finalidad principal la protección de la sociedad y la reparación del daño causado a la víctima, asegurando que los responsables sean sancionados conforme a la ley.
Características de la jurisdicción penal:
Pregunta: ¿Qué finalidad principal busca la jurisdicción penal? a) Resolver disputas civiles. b) Garantizar la reparación del daño a la víctima y proteger a la sociedad. c) Mediar entre las partes en conflictos laborales. d) Establecer relaciones internacionales. Respuesta: b) Garantizar la reparación del daño a la víctima y proteger a la sociedad. Pregunta: ¿Cuál de las siguientes características indica que solo el Estado puede ejercer la jurisdicción penal? a) Es restringida. b) Es excluyente. c) Es inderogable. d) Es inherente a la soberanía del Estado. Respuesta: d) Es inherente a la soberanía del Estado. Pregunta: Si un particular decide resolver un delito por sus propios medios sin acudir a las autoridades, ¿qué característica de la jurisdicción penal está siendo ignorada? a) Es inherente a la soberanía del Estado. b) Es exclusiva y excluyente. c) Es inderogable. d) Es restringida. Respuesta: c) Es inderogable. |
El caso de Javier y el asalto a una tienda
Javier es acusado de asaltar una tienda de electrónica. La tienda decide no presentar cargos a cambio de que Javier devuelva lo robado y pague una compensación. A pesar del acuerdo, el Ministerio Público, enterado del caso, decide iniciar una investigación y ejercer acción penal.
El caso refleja cómo la jurisdicción penal es inderogable. Aunque las partes lleguen a un acuerdo, el Estado, en función de proteger el bienestar y la seguridad social, puede decidir ejercer la jurisdicción penal y asegurar que se siga el proceso legal correspondiente.