Purim y la Sabiduría Kabalística.
Uno de los principios centrales de la Kabalá es que los seres humanos son, en su esencia más pura, luz divina. Esta luz es la chispa de la divinidad que reside en cada uno de nosotros. Sin embargo, esta luz no siempre se manifiesta plenamente debido a una capa llamada "Klipá", que actúa como una cáscara que la atrapa y oscurece su brillo.
La Klipá representa las barreras espirituales, emocionales y psicológicas que impiden que nuestra luz interior se exprese completamente. Estas barreras pueden ser el resultado de acciones negativas, pensamientos erróneos o emociones desequilibradas. A través de las prácticas kabalísticas, se busca romper y eliminar estas Klipót (plural de Klipá) para liberar la luz interna y permitir que nuestra verdadera esencia brille.
"La luz de alguna manera está atrapada en algo que llamamos la Klipá, la Klipá, que es la cáscara que atrapa la luz, y entonces es lo que nos impide... a través de las vidas, la separación que hemos estado creando con el Sol, con la Divinidad. De alguna forma esa luminosidad ha sido atrapada." |
El proceso de liberar esta luz implica un trabajo constante de auto-examinación y meditación. La Kabalá enseña que al reconocer y trabajar sobre nuestras Klipót, podemos aumentar nuestra conexión con la Divinidad y experimentar una vida más iluminada y significativa.